Cuatro personas que viajaban en una furgoneta atropellan a una mujer solitaria que caminaba en la oscuridad por un camino rural. Después de subirla al vehículo para llevarla al hospital más cercano, notan que se está comportando de manera bastante extraña. Los ocupantes de la furgoneta pronto se dan cuenta de que ha llegado el momento de luchar por sus vidas, y juntos acuerdan una regla muy sencilla: "no te sientes junto a ella".